Lo primero y principal es también lo más complicado. Se trata de mantener la calma para poder actuar correctamente ante la situación en cuestión.

No todas las urgencias son iguales y, por tanto, no requieren el mismo nivel de rapidez a la hora de actuar. Es decir, una reacción alérgica no es igual que una hemorragia interna, pero ambas necesitan ser tratadas sin demora.

Lo segundo que debemos hacer es hacer fotos/vídeos de lo acontecido si se tiene la oportunidad. Si nuestro animal presenta una convulsión lo ideal sería tener documentado dicho episodio para poder mostrarlo al llegar al Hospital; si presenta diarreas siempre es conveniente hacer una fotografía o incluso, de ser posible, recoger una muestra. 

Lo tercero si fuese posible es valorar, al menos, estos tres factores:

• El color de las mucosas (viendo el interior de los belfos o la conjuntiva)
• El estado anímico del animal (si ha estado decaído todo el día o ha empezado ahora, por ejemplo)
• La respiración del animal (si jadea, si parece que le cueste coger aire…)

Simplemente observando estas tres cosas obtendremos mucha información que en HURVET podremos interpretar para llegar a un diagnóstico más rápido y actuar así con mayor brevedad y eficacia.

Lo cuarto es acudir directamente al Hospital o bien, si se tienen dudas, llamarnos por teléfono para obtener indicaciones y resolver las posibles dudas que surjan.

Pautas para casos concretos:

• Ante una convulsión, bajo ningún concepto se debe introducir la mano en la boca para “que no se trague la lengua”, es un falso mito muy extendido con el que sólo conseguiréis tener que ir a urgencias por un mordisco. Tan sólo procurar que no se haga daño ni se golpee, y una vez pase la convulsión, mantenerle tranquilo.
• Ante una hemorragia activa, podéis intentar hacer un vendaje compresivo con gasas y vendas para taponar el sangrado, o bien coger gasas/papel en su defecto y presionar la zona mientras se traslada al Hospital.
• Ante un caso de intoxicación, NUNCA se debe intentar hacerle vomitar con remedios caseros tales como el agua oxigenada o agua con sal, eso puede ocasionar un gran daño al esófago incluso peor que el tóxico. Existe una medicación concreta para producir la emesis. 
• No administrar ninguna medicación en domicilio sin consultar con un Veterinario. Hay medicamentos de personas que son peligrosos, y otros que mal administrados pueden complicar la situación.

En general, no es recomendable buscar información en Internet: puede conducir a falsos diagnósticos o errores de medicación muy peligrosos. Habla siempre con un profesional Veterinario. Él es el único que tiene los conocimientos necesarios para recomendarte lo más adecuado.

Sabemos lo difícil que es actuar cuando un miembro tan importante de la familia sufre algún accidente o enfermedad. Por ello, en HURVET estamos las 24 horas los 365 días operativos a pleno rendimiento para dar un servicio impecable y de calidad.